domingo, 3 de enero de 2010

NORTE

En algún momento del tiempo de esta existencia vana me perdí en el camino, la brújula se quebró y mi norte se extravió.

Qué extraña suerte de elementos tan sutiles me atraparon?
Disfrazados de mil maneras aun no aprendidas se me ofrecieron cual tentación y caí en la somnolencia del juego de ese magnetismo animal, emocional y carnal que atrapó mis cuerpos en la telaraña de dolor…

Mucho dolor acompañado de un silencio profundo que duele en el alma.
Es la nota fa nuevamente… cuantas veces caí en sus garras sintiéndome en el limbo…
En ese silencio sepulcral que acompaña el miedo, la incertidumbre y toda la gama de dudas que llegan cuando uno se siente desconectado..

Silencio total.

Mi alma clama… y alguien en mi escucha… el buscador ¡
El caballero de armadura oxidada sale en rescate de mi Santo Grial…
El me muestra que mi cordón de conexión está intacto….no hay daño alguno… solo hay un espacio sin cuenta de la experiencia en la oscuridad… estuve dentro de la tierra y sembré una semilla. Cuando ella brote, cosecharé la experiencia que me llevará a la nada de la muerte o al todo de la vida eterna.

No mas juicios, no más dudas…todo vuelve a la claridad.

Regreso al juego cósmico santificando la cruz, activando el rumbo de mi movimiento, hacia el Norte en ascensión vertical y reencontrándome en el camino medio contigo Padre por fin encuentro mi Reconexión.
Enero 3 de 2010

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